10 TIPS: SAN FRANCISCO

San Francisco es una ciudad que es difícil no disfrutar. Vayas con un plan o no, con cada paso que des te vas a encontrar con algo que te hará sentir ese good-feeling que acompaña de la mano a la ciudad de la bahía.

A pesar dello, si quieres disfrutarla casi al 100% (no al 100% porque siempre hay un sitio nuevo maravillos que puedes descubrir), os damos una series de consejos que os facilitarán saborear algunos de los mejores rincones que esconde nuestra preciada urbe.

1.- Coge una bicicleta para pasear por el Golden Gate

Poner como consejo visitar el Golden Gate borraba toda originalidad a esta parte del post (A pesar de que, evidentemente, no puedes irte de San Francisco sin haberle visitado). Por lo que nosotros os aconsejamos visitarle cruzándole en bicicleta y paseando por sus alrededores con magníficas vistas. Las tiendas de alquiler de la zona saben que esta es una buena idea y se aprovechan (Alrededor de 20 dólares por 2 horas de bicicleta), pero aun así lo aconsejamos profundamente. Disfrutarás más y ahorrarás muchísimo tiempo mientras sientes la brisa de la bahía en tu rostro.

Imagen 1. Paseo en Bici

2.- Si vas en invierno, ves preparado para la lluvia

San Francisco es una ciudad lluviosa en invierno, aunque a veces sorprenda con magníficos días. Por ello os recomendamos un buen chubasquero o paraguas. Cuando estuvimos nosotros nos hizo un día de perros, pero al día siguiente no había ni una sola nube. Así que a disfrutar de la ciudad, aunque llueva…solo es agua.

Imagen 2. Lluvia en San Francisco

3.- Visita Alcatraz

Aquí sobran las palabras. Alcatraz es mundialmente conocida y aunque no hayas estado sabes que es impresionante. Esto se confirma cuando vas llegando a ella en el barco y cuando te paseas por su interior recreando las historias que la audioguía(que es muy buena) te va relatando. La disfrutaréis aún más los que tenéis buena imaginación.

Imagen 3. A veces la lluvia ayuda...

Avisamos que la entrada son casi 40 dólares. Puede parecer caro, pero no os lo parecerá cuando salgáis de visitarla.

4.- Saborea Little Italy

Mamma mía! Little Italy. Cuanto encanto conserva. A pesar de que las grandes superficies ya casi han aniquilado todo lo bonito que tenían los comercios familiares, en Little Italy algunos todavía sobreviven. Andando por sus calles te encontrarás con sombrererías y zapaterías artesanas, un genuino taller de Alfa Romeo con la bandera italiana en la puerta, panaderías pequeñas y un montón de sitios para comer pasta. Nosotros somos unos grandes aficionados gastronómicos y la visita a uno de estos sitios no podía faltar. Os recomendamos “The Italian Homemade Company”, sólo con entrar al sitio sabréis por qué.

Imagen 4. Tallarines Boloñesa en The Italian Homemade

5.- Visita los muelles

Cuando entras en esta zona quizás te sientas transportado a otro sitio, ya que este rincón de San Francisco posee un encanto especial que le hace estar aislado de la ciudad. El Pier 39 es muy bonito, con un montón de tiendas en el mismo muelle, y con los famosos leones marinos tomando el sol (o la lluvia), exhibiéndose delante de la gente. Y por supuesto, Alcatraz y el Golden Gate de fondo desde otra perspectiva. Un must-do.

Imagen 5. Chocolate Shop en el Pier 39

6.- Saborea Chinatown

Quizás no tenga el encanto que tiene Little Italy (Al menos para nosotros), pero merece la pena recorrer su calle principal empezando desde la conocida Dragon´s gate, echando un vistazo a las tiendas de artesanía asiática y sorteando a repartidores de panfletos en cada esquina. La mejor parte viene cuando hay que parar para comer, pero tened cuidado. Hay sitios que son muy cutres y malos, otros bonitos y malos, otros cutres y buenos, y por último están los bonitos y buenos. De todas formas, TripAdvisor siempre funciona. Nuestra recomendación: Hunan Home´s restaurant.

Imagen 6. Mural de Bruce Lee 

7.- Sube a Twin Peaks

Y no, no es el Twin Peaks de la mítica serie. Ese Twin Peaks le tenemos nosotros aquí al lado de Seattle. El Twin Peaks de San Francisco se trata de dos colinas en medio de la metrópolis desde el que se puede vislumbrar toda la ciudad y sus alrededores en un giro de 360 grados. Las vistas son impresionantes y los accesos para ir a pie nulos (Como casi todo en USA). Un Uber os saldrá tirado de precio. Si tenéis tiempo, para bajar os recomendamos ir andando. Aunque al principio tienes que andar un tramo por la carretera, luego te sumerges en el barrio de Haight Ashbury, del que hablaremos más adelante.

Imagen 7. Vista desde Twin Peaks

8.- Visita sus monumentos históricos

San Francisco no es todo ciudad contemporánea, sino que también tiene sus edificios emblemáticos de carácter histórico. Por ejemplo, su catedral Grace Cathedral de 1934 es una réplica de la catedral gótica de Notre Dame, y luce majestuosa entre la modernidad de la ciudad.

Imagen 8. Grace Cathedral

El otro monumento que nos gustó mucho fue el Ayuntamiento de San Francisco. Fundado en 1915, este colosal edificio ha sido testigo de grandes momentos históricos, y a veces tristes, como el asesinato del gran Harvey Milk.

9.- Visita sus barrios más emblemáticos

Además de Little Italy, Chinatown o la zona de los muelles; San Francisco no acaba aquí. Si tienes tiempo os recomendamos visitar Haight Ashbury, que es el barrio histórico hippie de la ciudad, y el cual aún conserva esta particularidad con gente que vive en los 60. Aquí puedes encontrar las típicas Painted Ladies, además de otras casas de estilo victoriano que no te dejarán indiferente. De hecho nosotros preferimos estas otras casas antes que las Painted Ladies.

Imagen 9. Casas Victorianas en Haight Ashbury

También recomendamos visitar Castro, uno de los núcleos de la lucha por los derechos de los homosexuales en Estados Unidos, con repercusión evidentemente mundial. Como todos los barrios de la ciudad, este tiene su propia personalidad, así que no dejes de visitarlo.

10.- Evidentemente: Prepárate para subir cuestas

Sí vale, es evidente, ya lo sabemos, pero luego nos ponemos guapetes para estar lo más cool posible en San Francisco y en la primera cuesta ya estamos llorando: “Vamos a darnos la vuelta que me duelen las piernas”. Calzado cómodo, por favor. La otra alternativa es coger el tranvía o el Uber cada vez que quieras ir de un lado a otro, pero te perderás muchas cosas. Aquí no juzgamos a nadie, buena idea también.

Estos son nuestros consejos, por supuesto no son los únicos, y unos os parecerán geniales y otros no. Si tenéis alguna sugerencia estaremos encantados de escucharla en los comentarios.

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